(Subí el volumen del reproductor para acompañar la lectura)
Buscándote en algún pliegue de mi sábana, color salmón con flores en verde, pude sentir tu calor, sin siquiera lograr verte.
Tu abrazo contenía mi cabeza sobre tu pecho y así, muy despacio el sueño se adueñó de nosotros.
El respirar de tu pecho me acunaba y podía sentir el latir de tu corazón. Ritmo que me recordaba a una suave canción de Jhon Lennon, donde el imaginar era cosas de locos y una utopía de muchos.
Me pediste que te buscara en algún pliegue de mi sábana, color salmón con flores en verde, y así lo hice, pensando que a la mañana siguiente aún estarías a mi lado.
Respiré profundamente para inhalar tu esencia invisible, y un suave suspiro salió de mi boca, boca de la cuál las palabras estaban demás, porque mi alma cantaba la música de tu corazón y tu mente.
Hoy estuviste en el más pequeño de los pliegues de mi sábana, como duende que se esconde para no ser visto, jugando con sus travesuras, haciendome cosquillas para sacar una risa de mi alma .
Hoy sí lograste mantener despierta mis ansias de encontrarte en la amplia cama, donde sin tenerte, el frio llega a mis huesos.
Pudiste entrar por la ventana como aquella brisa de mar que acompañada con las olas parecen "susurros" de otroño.
Traté de no abrir los ojos, temía no verte, así que descansé tiernamente abrazada a la almohada, creyendo que por debajo de la funda podrías acariciar con tu mano mi cabeza y así sentir la serenidad como cuando "escucho" tus palabras.
Y de esa forma, muy pausadamente comencé a soñar. Soñé con un gran camino delante mio, en cuyos costados había flores de color amarillo como a mi me gustan, y detrás de ese camino una sencilla hamaca colgada de un árbol. Me dirigí hacia ella y vos por detrás me empujabas para que tomara vuelo. Mi niña interior se reía a carcajadas y pedía que me elevaras con más fuerza, como queriendo agarrar una nube para poder regalártela y que sobre ella pudieras atravesar el cielo.
Soñaba, y en ese viaje maravilloso solo pude encontrar esa alegría tan anhelada por toda mujer amante de la vida.
Sí, anoche dormiste en un pliegue de mi sábana, y ¿sabes que?...Aun sigues estando allí
Silrita
7 comentarios:
Hola Silvana:
Como siempre tu entrada bellísima.
Te mando mucho cariño, Montserrat
Gracias Mont por estar siempre presente. Te quiero
M A R A V I L L O S O
ME ENCANTÓ,
Y QUEDÉ ENCANTADO
BRAVO!!!!
¡Hola, Silvana! Como ves, hoy comencé a leer tu blog. Lo poco que leí hasta ahora... ¡Me encantÓ!!!!! Es hermoso y con mucho sentimiento. ¡Siempre en mi corazón! ¡Besitos!
Extraordinariamente maravilloso, cuanto sentimiento alberga tu corazon, cuanto amor brinda!!
Extraordinariamente maravilloso, cuanto sentimiento alberga tu corazon, cuanto amor brinda!!
Gracias a todos por estar presentes. Gracias por apoyarme, por empujarme a seguir en este camino que amo, que son las letras.
Gracias de corazón a todos
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