VOLVER

Teniendo los ojos tapados,
Oscuridad absoluta del incierto.
Oídos cerrados por tormentos
Por palabras encubiertas con recuerdos.

Así fue como me encontraste
Con las manos y pies encadenados,
La boca cerrada con candado,
Por no decir todo lo cierto.

Tu mano tomó la mía,
Empujando con fuerza para salir del encierro,
Resbalando cada tanto nuestros dedos,
Pero quedando aún entrecruzados

Destapaste mis ojos con cautela,
La luz me seguía encandilando.
Despacio susurraste a mis oídos
Para no sentir como gritos, tus palabras.

Sensación de libertad presentía,
Pesando angustia aún sobre mi espalda.
Un volar leve y minucioso,
Emprendimos vuelo con las alas entrelazadas.

Silrita